¿Cómo sacarle el mejor provecho a los compresores de aire?

¿Cómo sacarle el mejor provecho a los compresores de aire?

Los compresores de aire son herramientas que, sin duda, optimizan los tiempos de tareas del hogar o laborales. Básicamente, el movimiento del pistón del que consta comprime el aire o el gas, el cual permite la generación de energía interna, que cumple la primera Ley de la Termodinámica. Estos pueden tener diversos usos. Como por ejemplo: inflar llantas, limpiar o pintar. Incluso, hacen parte de electrodomésticos tan comunes como los refrigeradores.

Pero, cómo funcionan los compresores de aire. Primero, por medio de la entrada de calor al compresor se da la evaporación. Luego, cuando se abren y se cierran las válvulas se da la compresión. Seguido, está la condensación mediante la salida del calor del compresor y, por último, la expansión de la válvula cuando el calor del compresor sale. Este ciclo de operación permite que tal proporción de energía sea funcional en herramientas y en maquinarias de construcción.

Tipos de compresores de aire

Aunque todos funcionan con la misma dinámica, estos compresores suelen diferenciarse de acuerdo con el método de intercambio de energía:

Compresor de desplazamiento positivo. Se usa cuando se necesita más volumen de aire pero a baja presión. Por ejemplo, un inflador de llantas de bicicleta.

- Comprensor de émbolo. Mediante el movimiento de un émbolo dentro de una cámara, hacia arriba y hacia abajo, el aire se va introduciendo mientras se comprime y va a un depósito de reserva. Generalmente, los compresores domésticos funcionan de esta forma pues son simples.

- Compresor de pistón. Funcionan por medio del movimiento de motores de combustible o gas. Trabajan de a dos pistones de diferentes volúmenes para que, al comprimir el aire, se alcancen presiones más elevadas.

- Compresor de tornillo. Funciona igual que el de émbolo, pero este usa dos tornillos largos para comprimir el aire. Asimismo, cuenta con un sistema de lubricación para su operación.

Su uso depende en gran medida del tipo de necesidad que se quiera atender. A continuación, algunos ejemplos de las aplicaciones que pueden llegar a tener los compresores de aire.

- Los compresores tienen una utilidad básica, pero primordial: inflar. Desde neumáticos, pasando por colchones, hasta flotadores. Incluso, bombas para algún tipo de celebración.

- Pintar con un compresor no solo facilita la tarea; también ayuda a un perfecto acabado. Desde puertas, paredes, rejas, bicicletas, muebles, hasta casi cualquier cosa que se desee. Solo basta con acoplar a la pistola distintas boquillas para que la salida de la pintura permita varios acabados y efectos.

- Engrapar o poner clavos antes era una tarea accidentada. Pero el uso de compresores de aire brinda rapidez y seguridad. Por lo que arreglar estructuras de madera, poner repisas, etc., será más fácil. Ahora los martillos y destornilladores son accionados por compresores.

- Estos también son un gran aliado a la hora de realizar tareas de limpieza en rincones o lugares de difícil acceso.

Los compresores de aire no solo brindan beneficios en las tareas domésticas. También en las industriales, pues facilita la ejecución y permite un gran apoyo en las actividades con un tipo de energía limpia, además de económica.